La 34ª jornada de Segunda

Un inmerecido castigo

Un Zaragoza valiente e intenso suma una dolorosa derrota en el Ciutat tras nivelar el gol inicial y ser mejor que el Levante en la segunda parte

El gol de Dela supone una tropiezo que impide mirar con tranquilidad el futuro, aunque las sensaciones de este equipo sean mucho mejores que hace un mes

Francés evita la ocasión de fabrício en la primera mitad del partido.

Francés evita la ocasión de fabrício en la primera mitad del partido. / J. M. López / Levante EMV

No mereció perder el Real Zaragoza en el Ciutat, se levantó al gol inicial de Brugué, niveló la contienda con un buen tanto de Toni Moya y fue superior en la segunda parte a su enemigo que encontró el premio en un disparo imparable y lejanísimo de Dela que supuso un inmerecido castigo para un equipo que mejoró su lánguida faz viajera y que supo maniatar al Levante además de generar más ocasiones que el rival, pero se marchó de vacío, prolongando a trece los viajes sin ganar en esta Liga, y sin poder apartar la mirada del peligro.

El descenso está a siete puntos pendiente de lo que haga el Alcorcón, y restan ocho jornadas. Aún hay que remar, está claro, pero este Zaragoza más ágil y suelto en ataque, con más mordiente y llegada, tiene más visos de remontar para llegar a la orilla que el muerto que dejó Julio Velázquez hace un mes y que ha mejorado Víctor, haciendo progresar al equipo, aunque los resultados no le den la razón todavía, con cuatro puntos de 12. Sí se la dan la evolución y la idea del juego, como también en las mejoras individuales, ya muchas (Francés, Valera, Toni Moya, Jair...) y a las que en el Ciutat se unió también la de Bakis, con mejor pinta que otros días .

Azón en la banda y un 4-2-3-1

Apostó Víctor por los mismos nombres que ante el Tenerife, pero reforzó la medular situando a Maikel Mesa en el pasillo interior y con Azón en la banda izquierda en un claro 4-2-3-1 ante un Levante que también planteaba su fortaleza en el medio, con Algobia, Lozano y Pablo, para tener en Fabrício su referencia arriba y con la velocidad en las bandas. El que comenzó amenazando fue Brugué, que se marchó de Azón y generó la primera ocasión antes de que en un córner llegara el gol en el minuto 3, con el extremo anticipándose a la marca de Toni Moya y rematando de cabeza con la pantalla que le hizo Fabrício para que el partido cogiera muy mal color para el Zaragoza.

Fabrício era un dolor para Francés y sobre todo para Jair y el Zaragoza sufría, aunque se fue reconstruyendo a través de un buen trabajo en el medio y con recuperaciones rápidas y balones al hueco como el que Francés le puso a un activo Valera para que su centro lo rechazara Dela y Maikel Mesa le dejara el balón a Toni Moya, que la envió a la escuadra en el minuto 19 con un gran gol.

El tanto terminó de nivelar el pleito, en las sensaciones y en el marcador, un choque abierto, de área a área, entretenido y en el que el Levante amenazaba en el balón parado y llegando bien a zona de tres cuartos, con Rober Ibáñez generando problemas a un Mouriño ya amonestado, y el Zaragoza lo hacía con rápidas transiciones tras robo. En una de ellas, un centro de Toni Moya no tuvo rematador.

Francés, que supo cortar un peligroso avance de Fabrício sin penalti, y Azón se encontraron en sendos remates con Andrés y Dela la mandó alta tras una falta en corto antes de que un grave error de Maikel Mesa en un pase atrás que encontró a Álex Muñoz, pero no lo aprovechó Fabrício mandando un balón al lateral de la red justo antes del descanso. 

La segunda mitad arrancó sin cambios y con un balón que sacó Francés en un córner. Fue un espejismo, porque el Zaragoza fue a más de forma clara para imponer su propuesta y su intención, con un equipo valiente y que empezó a generar problemas a su enemigo. Un centro de Bakis no lo alcanzó Valera y el turco lanzó un misil que Andrés despejó con apuros. El Zaragoza se situó con la presión adelantada y fluía con precisión en ataque, con Maikel Mesa participando más que otros días.

El propio Mesa lanzó por poco fuera una falta en la frontal y Bakis remató mal en otro envío desde la estrategia de Moya. El Levante, que ya había relevado a Fabrício por el temor a una segunda amarilla que le pudo mostrar Guzmán Mansilla, movió más el ataque con Álvaro Romero, pero el Zaragoza era el amo del partido y una buena jugada de Bakis acabó en un remate flojo de Maikel Mesa. Víctor apostó por Liso ante un Azón agotado y el canterano rozó el gol que se lo negó Dela cuando faltaba un cuarto de hora y el Zaragoza merecía ganar de forma clara.

Dos acciones de Brugué, con Jair imperial en las tareas defensivas, llevaron a Víctor a apostar por Grau para reforzar el medio, pero fue Dela el que solventó el duelo con un disparo tremendo e inapelable en el 86. Con Vallejo y Gámez en el campo, Jair evitó el gol de Iván Romero y tuvo en sus botas el empate en una media chilena que le hubiera hecho justicia a este Zaragoza que recibió un inmerecido castigo ante el Levante.