SEGURIDAD CIUDADANA

Zaragoza instalará nuevas cámaras de videovigilancia en Delicias, el Casco Histórico y zonas de ocio nocturno

Estarán colocadas a finales de 2024 y varias se situarán en entornos donde se aglomeran los locales de ocio nocturno

Iván Trigo

Iván Trigo

El Ayuntamiento de Zaragoza trabaja ya en aumentar las zonas de la ciudad vigiladas con cámaras de seguridad. Según ha avanzado este lunes la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, en una visita al cuartel de la Policía Local de La Paz, las áreas en las que se instalarán los nuevos dispositivos serán la calle Delicias y alrededores; varios puntos del Casco Histórico como la calle Alfonso, Don Jaime I y el parque Bruil; y también algunas calles del distrito Universidad y el Centro (zona de María Lostal) en las que hay locales de ocio nocturno.

El objetivo es que las nuevas cámaras entren en funcionamiento a finales de este año o principios del que viene y se sumarán a las ya existentes en el barrio Oliver (dos dispositivos), la zona del Gancho y Zamoray-Pignatelli (12 más); y todo el entorno de Doctor Cerrada (14). Por el momento, se desconoce el número exacto de aparatos que se colocarán en la ciudad ya que es ahora cuando se está estudiando su ubicación exacta. Las zonas que se cubrirán corresponden a peticiones realizadas por vecinos y comerciantes aunque, según informa el consistorio, se desconoce si técnicamente es viable instalar estos dispositivos en las calles en las que se han pedido.

Así, los técnicos del ayuntamiento y la Policía Local están trabajando conjuntamente para valorar si todas las peticiones de los vecinos son viables. Para poner en marcha esta extensión de la red de cámaras de videovigilancia se invertirán primero unos 20.000 en un contrato para redactar el proyecto de instalación. Y para comprar los dispositivos y colocarlos, el ayuntamiento cuenta con una partida reservada para tal fin que asciende hasta los 270.000 euros.

Sobre las zonas, la voluntad inicial es instalarlas en la calle Delicias y adyacentes. En este barrio de Zaragoza se dieron el año pasado ocho acuchillamientos, uno de ellos con resultado de muerte. En la zona del Gancho, una de las más conflictivas de la ciudad, también se quiere instalar algún dispositivo que se sumará a los doce que ya existen en este barrio. Aunque en el caso del Casco Histórico, también se quiere poner cámaras en la entrada a la calle Alfonso desde el Coso y a mitad de la calle Don Jaime I.

Asimismo, se instalarán dispositivos de videovigilancia en el entorno del parque Bruil, una zona en la que en los últimos meses están aumentando los problemas de convivencia.

Zona del campus San Francisco

En el distrito Universidad se prevé poder cubrir con las nuevas cámaras las zonas de accesos al Campus San Francisco en Pedro Cerbuna y también el punto donde confluyen la avenida Valencia y San Juan Bosco, que es donde se encuentra la discoteca Garden, en cuyos exteriores también han ocurrido peleas y reyertas.

Por último, se prevé colocar alguna cámara en la zona de María Lostal, muy frecuentada por las noches y que también ha sido escenario de alguna pelea. El objetivo de este despliegue, afirmó Chueca, es reducir los índices de criminalidad, aunque en Zaragoza, defendió, se sitúan por debajo de la media de otras grandes ciudades españolas. «Invertir en seguridad es invertir en libertad», afirmó la regidora.

En las tres zonas de la ciudad en la que ya se han instalado cámaras «ha disminuido» la actividad delictiva, afirmó Chueca, por «el efecto disuasorio de los dispositivos de videovigilancia. Además, según datos del propio ayuntamiento, las cámaras han ayudado a resolver o aclarar más de 140 crímenes.

Las cámaras tendrán también que ser autorizadas por la Comisión de Videovigilancia, en la que participa el Tribunal Superior de Justicia de Aragón y la Fiscalía, entre otras instituciones. Las imágenes se graban y quedan custodiadas por la Policía Local y solo pueden ser reclamadas por un juez o por la Policía Nacional en el transcurso de una investigación.

La inversión en estas cámaras de seguridad forma parte, afirmó Chueca, de un plan para mejorar los medios técnicos de la Policía Local, una medida que se suma a las plazas que se han ido sacando en el cuerpo. Asimismo, el ayuntamiento prevé comprar otras 735 cámaras que los agentes llevarán instaladas en sus uniformes.