Presupuestos municipales

Fracasa la cuestión de confianza del alcalde de Sevilla: segundo rechazo en bloque de la oposición en una semana

PSOE, Vox y Podemos - Izquierda Unida han votado que no y siguen sin aprobarse las cuentas municipales

Se abre el plazo de un mes para presentar una improbable moción de censura a José Luis Sanz

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz atiende a los medios de comunicación.

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz atiende a los medios de comunicación. / MARÍA JOSÉ LÓPEZ

Rafa Aranda

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha recibido el voto negativo de todos los concejales de los tres grupos de la oposición (PSOE, Vox y Podemos - Izquierda Unida) y por tanto no sale adelante la cuestión de confianza a la que se ha sometido este viernes a primera hora de la mañana en la sede del Ayuntamiento. Una sesión que estaba destinada al fracaso y que se ha convertido más en el último acto de campaña del 9J, unas elecciones muy importantes para los liderazgos en el PP. Dirigentes del partido de todos los tiempos, como Javier Arenas, Ricardo Tarno, Toni Martin, Ricardo Sánchez, Patricia del Poz o, Verónica Pérez han estado en primera fila siguiendo el pleno y arropando a José Luis Sanz.

Termina así el segundo intento del alcalde en cinco días de lograr que su Presupuesto para 2024 sea aprobado. Después de que el lunes la oposición coincidiera en tumbar las cuentas diseñadas por el grupo municipal popular (ahora mismo trabajan con unas prorrogadas y elaboradas por el PSOE para su anterior mandato) nada ha variado. El alcalde sevillano activó la opción de una cuestión de confianza vinculada al Presupuesto, de manera que aprobar una cosa significase dar validez a la otra de manera automática, pero no ha sido así.

Sanz comenzaba su presentación hablando de "una cuestión de confianza histórica. Nunca se ha puesto en marcha algo de este tipo". Y argumentaba que está "para gobernar. Empieza la cuenta atrás para que esta ciudad tenga un presupuesto". "No les pido que voten que sí a este alcalde o al Partido Popular. Que voten pensando en el interés de los sevillanos", solicitaba como último recurso. Pero los tres grupos ya tenían decidido su voto negativo.

"Su balance es tremendamente pobre. No genera ilusión. Es muy mal alcalde", le ha espetado el portavoz del grupo socialista, Antonio Muñoz. "Pretende que en Vox nos retratemos pero el único que va a quedar retratado es usted. Es una marioneta dirigida por San Telmo", ha asegurado Cristina Peláez, la portavoz de la formación de extrema derecha. Ismael Sánchez, concejal de Podemos - Izquierda Unida, ha coincidido afirmando que "no sé si es que el Ayuntamiento les queda grande, si no tienen equipo, si es que no pueden. Van de derrota en derrota".

Un mes para presentar una moción de censura

Una vez el recurso de la cuestión de confianza ha quedado atrás y sin validez, y por tanto el Presupuesto no ha quedado aprobado, ahora se abre el plazo de un mes para que PSOE, Vox y Podemos - Izquierda Unida intenten ponerse de acuerdo y presentar una moción de censura, unida a la elección de un candidato de consenso a la alcaldía.

Sin embargo, tanto PSOE como Podemos - Izquierda Unida han manifestado su intención de no pactar de ninguna de las maneras con Vox. Y estos tampoco quieren acercarse a los partidos de izquierda. "No negociaremos una moción de censura con la extrema derecha", ha afirmado Antonio Muñoz, portavoz socialista. "Nuestro grupo jamás la va a firmar", añadía Ismael Sánchez, concejal de Podemos - Izquierda Unida. Y desde Vox, su portavoz Cristina Peláez ha asegurado que "el término pinza no existe ni existirá jamás".

Se llegaría, por tanto, a la primera semana de julio sin una alternativa al actual Gobierno local. Y sin cuestión de confianza y sin moción de censura, el tercer paso sería la aprobación automática de los presupuestos, de manera inicial, teniendo que publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia de Sevilla (BOP). Aquí se volvería a abrir un nuevo plazo, de 15 días hábiles para reclamaciones y alegaciones.

Si se presenta alguna, los presupuestos tendrían que regresar a un pleno para su aprobación definitiva. En caso de que no haya reclamaciones ni alegaciones, se aprueban directamente sin la necesidad de pleno.