Ni un córner contra diez

El atasco ofensivo en Andorra dejó al Real Zaragoza sin botar un solo saque de esquina

Hace más de 2 años y medio que no sucedía algo así

Mesa busca a Valera durante el partido ante el Andorra.

Mesa busca a Valera durante el partido ante el Andorra. / CARLOS GIL-ROIG

Jorge Oto

Jorge Oto

Hay datos que hablan por sí solos. El Real Zaragoza no fue capaz de botar un solo saque de esquina durante todo el partido disputado el pasado jueves en Andorra a pesar de jugar con un futbolista más durante más de una hora y cuarto como consecuencia de la expulsión del local Bover en el minuto 17.

El atasco ofensivo de los aragoneses fue tremendo. Así como su extrema dificultad para generar fútbol y llegar con cierto peligro a las inmediaciones del área contraria. Apenas un par de contragolpes mal ejecutados subrayan las severas dificultades ofensivas que viene sufriendo un equipo que, incluso, estuvo a punto de quedarse sin el triunfo.

La escasa presencia del cuadro de Escribá en la zona de tres cuartos le apartó, incluso, de explotar la estrategia, una herramienta básica en Segunda División y que ha dado suculentos réditos en anteriores jornadas. Pero el Zaragoza creó tan poco peligro más allá del tanto de Mollejo que ni siquiera fue capaz de forzar un solo saque de esquina, algo que no ocurría desde hace mucho tiempo. En concreto, desde febrero de 2021. Casi nada.

Entonces, el Zaragoza lograba el triunfo en Málaga (1-2) con goles de James y Vigaray. El equipo aragonés, en plena escalada con JIM después de una aguda crisis que se había llevado por delante ya a Baraja e Iván Martínez, sumaba tres puntos vitales en su único objetivo de lograr la salvación. Y lo hizo sin botar un solo córner, pero con una producción ofensiva mucho mayor.

Si entonces no hizo falta recurrir al saque de esquina, en Andorra el Zaragoza fue una cuestión de incapacidad. De hecho, apenas disparó a puerta. Y contra diez.