Opinión | apuntes al margen

Baja la consejera, sube la Marea

Este ha sido el primer curso con Claudia Pérez como consejera de Educación y el balance, evidentemente, es malo. Empezó el curso regalando 112 millones de euros a la concertada al tiempo que metía la tijera a las auxiliares de educación especial porque eran algo superfluo. Las protestas, especialmente fuertes en la provincia de Huesca, consiguieron revertir el recorte. El curso continúo con un caos organizativo donde se dejó de pagar un montón de complementos a los profesores. Los que trabajan en varios coles amenazaron con dejar de itinerar, porque llevaban 6 meses poniendo la gasolina de su bolsillo.

Mención aparte merecen los pobres profesores de FP a los que les adeudan hasta 7.000 euros de atrasos a cada uno. Pero sin duda, el protagonismo inicial lo tuvo la nefasta gestión de la consejera con la escuela de Caneto. Un problema pequeño, que afecta a 20 chavales, y en el que la consejera decidió entrar como Milei, con motosierra. El resultado: ha tenido que agachar la cabeza, eso sí, después de haber sufrido un importante desgaste. En la misma línea de actuación, la consejera y su equipo decidieron no aceptar el acuerdo firmado por el anterior gobierno con todos los sindicatos educativos en relación a horas lectivas. Al final, han acabado firmando otro similar al anterior, pero en el camino se han dejado jirones de credibilidad y a los sindicatos muy cabreados. Por el medio estableció un nuevo criterio para escolarizar alumnos que facilita el cierre de aulas en la pública, motivo por el cual colegios como el Tenerías están en pie de guerra. Y ya llegando al final de curso ha dado unas instrucciones de cupos (los cupos son las horas de trabajo totales de un colegio. Cuantas más horas, mejor atención) que han soliviantado a toda la comunidad educativa. Empezaron enfadándose los directores al ver los problemas de gestión que les caían encima. Los sindicatos vieron que se echaba a 500 profesores el próximo curso. La consejera, muy mal aconsejada por su equipo, entraba en el mundo de la fake news diciendo que el cupo aumentaba. Poco después, ante el evidente ridículo, cambió la versión a que había ajustes. Y en esto las familias empezaron a enterarse de lo que suponía para sus hijos: aulas más cargadas, menos apoyos, menos desdobles, perdida de muchos programas educativos, etc. Por eso, cada día sale otra noticia de un nuevo cole protestando. La consejera está en un momento crítico, porque Azcón es un tipo listo y sabe que tener otra Dolores Serrat y otra Marea Verde no van a ayudar a su reelección.

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