Elecciones en el Reino Unido

Sunak apunta a los votantes de más de 65 años para frenar la fuga de votos a la derecha populista

El candidato del Partido Conservador a las próximas elecciones generales, previstas para el 4 de julio, ha propuesto aumentar la cantidad mínima por la que los pensionistas deben pagar impuestos

El primer ministro británico Rishi Sunak apunta a los votantes mayores de 65 ante la fuga de votos a la derecha populista

El primer ministro británico Rishi Sunak apunta a los votantes mayores de 65 ante la fuga de votos a la derecha populista / ADAM VAUGHAN

Lucas Font

El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha lanzado una nueva propuesta este martes para tratar de evitar la fuga de votos de los sectores más mayores de la población al partido de derecha populista Reform UK. El candidato del Partido Conservador a las próximas elecciones generales, previstas para el 4 de julio, ha propuesto aumentar la cantidad mínima por la que los pensionistas deben pagar impuestos (actualmente en los 14.770 euros anuales) para evitar que las recientes subidas de las pensiones –acorde con la inflación– supongan en la práctica una pérdida de poder adquisitivo para los que reciben las prestaciones más bajas, que hasta ahora no estaban obligados a pagar impuestos por sus ingresos. Los conservadores calculan que esta medida supondrá un ahorro de más de 300 euros anuales para los pensionistas en 2030.

Sunak pretende así convencer a un sector de la población que votó mayoritariamente por su partido en las elecciones de 2019. Casi siete de cada diez votantes mayores de 70 años apoyaron a los ‘tories’ en esa ocasión, según una encuesta de YouGov, un grupo de edad más cercano a las ideas conservadoras y que podría decantarse en esta ocasión por Reform UK. El Partido Conservador estima que podría perder más de un centenar de diputados en los próximos comicios por culpa de la derecha populista, según un documento interno al que ha tenido acceso la agencia Bloomberg. La previsible fragmentación del voto de derechas beneficiaría al Partido Laborista, que conseguiría llevarse el escaño en circunscripciones tradicionalmente conservadoras al convertirse en la fuerza más votada. 

Las propuestas de Sunak tienen por objetivo frenar esta sangría de votos. El candidato conservador ya lanzó un guiño a los sectores más envejecidos de la población con su propuesta de recuperar el llamado “Servicio Nacional”, que tiene por objetivo la participación de los jóvenes de 18 años en el ejército británico durante un período de 12 meses o su implicación en voluntariados, un fin de semana al mes, en servicios como la sanidad, la policía o los bomberos. Una medida que cuenta con más apoyo entre los mayores de 50 años que entre los jóvenes, según las encuestas, y que refuerza el mensaje a favor de la seguridad nacional y de las fuerzas armadas que el primer ministro ha querido lanzar desde el comienzo de la campaña.

Críticas de los laboristas

Los conservadores pretenden atraer a los votantes de derechas y, al mismo tiempo, presentarse como un partido con propuestas frente a un Partido Laborista que, critican, no tiene un plan para el país. Unas acusaciones a las que los laboristas no han tardado en responder. La portavoz de economía del partido, Rachel Reeves, ha criticado las dos medidas –valoradas en cerca de 3.000 millones de euros cada una– y ha señalado que los mayores controles sobre la evasión fiscal, propuestos por los ‘tories’, no serán suficientes para costearlas. “Los conservadores han anunciado hoy el uso del dinero que ayer dijeron que iban a utilizar para financiar el Servicio Nacional. Sus cuentas no cuadran”, ha dicho Reeves este martes. 

Tanto Reeves como el líder laborista, Keir Starmer, han insistido en su apuesta por la estabilidad económica y han descartado nuevas subidas de impuestos en caso de ganar las elecciones, aunque tampoco han prevén rebajas fiscales. “A diferencia de los conservadores, nunca jugaré al despiste con las finanzas públicas ni sobre qué impuestos hay que bajar, sino que sólo anunciaré esos cambios cuando podamos permitírnoslo”, ha explicado Reeves. Los laboristas han recibido el apoyo de más de 120 directores de grandes empresas en las últimas horas –entre ellos el fundador de la cadena de supermercados Iceland, Malcolm Walker, o el expresidente de Aston Martin y de Nissan, Andy Palmer– y se han presentado como el único partido capaz de defender los intereses de los empresarios y de los trabajadores.