Cinco casos para estudiar en el Casademont Zaragoza

El Casademont Zaragoza ha hecho los deberes reclutando ya varias piezas para su equipo, algunas como apuesta inmediata, otras como plan de futuro. El club comienza julio con doce jugadores con contrato, incluido Álex Moreno, de los que nueve son exteriores. Así que parece complicado que todos ellos estén a las órdenes de Porfirio Fisac cuando arranquen las competiciones allá por septiembre.

El cuerpo técnico tendrá que tomar una decisión con respecto a varios de ellos, incluso sobre algún recién llegado. Está claro que Spissu, Slaughter y Bango vienen para ser importantes en los esquemas de Fisac, pero el caso de Joaquín Rodríguez es diferente. El escolta uruguayo ha sido una de las sensaciones de la última temporada en la LEBOro y han sido varios los clubs que han intentado ficharle, algo que finalmente ha conseguido el Casademont Zaragoza. Con un contrato por cuatro temporadas se trata de una apuesta de futuro del club, que puede pensar seguir o en una cesión a corto plazo para que el jugador se adapte a la Liga Endesa.

En los puestos exteriores es donde más jugadores tienen contrato ahora mismo y donde más decisiones habrá que tomar. Por ejemplo, si Fisac quiere tener tres bases y contar con Dídac Cuevas, que llegó el pasado mes de enero ante la plaga de lesiones y firmó hasta 2026. Hasta 2027 renovó Lucas Langarita, cuya progresión en estos momentos requiere de minutos de juego. El club deberá valorar si los puede tener aquí o debe buscarle un lugar donde ser protagonista el próximo curso.

También es jugador del primer equipo desde la pasada temporada Álex Moreno, cuya situación es similar a la de su compañero de selección, Langarita, en cuanto a la necesidad de seguir creciendo. Esos tres jugadores ocupan los casos más evidentes por la superpoblación de exteriores que hay en la plantilla a estas alturas. Nueve de los doce componentes juegan por fuera, un exceso con el que ningún equipo saldría a competir.

Por dentro la foto tampoco es fija. En el cuatro el club cuenta ahora mismo con Emir Sulejmanovic, pieza importante no solo por su rendimiento sino porque ocupa plaza de cupo para la FIBA, y el cubano Yoanki Mencía, que ocupa plaza de extranjero. Ahora mismo es el único con esa condición en la plantilla. Mencía llegó a mitad del curso pasado con un contrato de cuatro años, por lo que también es una apuesta a medio y largo plazo del club. De hecho, la idea original con su llegada era cederlo de manera inmediata para que se adaptara a Europa, pero Fisac quiso verlo primero y la realidad es que el cubano no se movió de Zaragoza.

Hay otros casos que requerirán también de un estudio por parte del club para tomar la mejor decisión para todas las partes. Por ejemplo con el maliense Youssouf Traoré, cuya progresión el último curso en las categorías inferiores invita a pensar que su crecimiento pasa por disputar una categoría mayor que la Liga EBA, donde milita el equipo vinculado del Casademont Zaragoza.