Vox critica el gasto público que va a ocasionar el equipo de Chueca

Vox avisó de que no serían complacientes en el Ayuntamiento de Zaragoza. Están dispuestos a demostrar que sus cuatro concejales tienen «más influencia» que los dos ediles que han condicionado el mandato de Jorge Azcón y, por mucho que la nueva alcaldesa, Natalia Chueca, tenga 15 concejales, quieren hacer valer el peso de su equipo, el que también necesita para impulsar cualquier proyecto estratégico que se plantee, como la Ciudad Inteligente del Deporte. Ya han dicho que tal y como lo plantea la regidora no contará con su apoyo. Primer aviso. 

Por ahora Chueca y Julio Calvo, no han empezado de la mejor manera. El portavoz de Vox criticó la estructura de Gobierno de la alcaldesa y le instó a reducirla para aminorar el gasto público que va a suponer todo el equipo que rodeará a las ocho consejerías y las 18 delegaciones. El Gobierno diseñado es demasiado extenso y caro para la ultraderecha. «Pensábamos que iba a diseñar una estructura más reducida», ha comenzado diciendo Calvo. «Entendimos que Azcón estuvo condicionado por Cs y que tuvo que satisfacer las demandas de sus concejales, lo que justificaba el número de áreas. Ahora era el momento de reducirlas», ha proseguido el portavoz de Vox, escoltado por los tres concejales de su equipo. 

La Igualdad, en el punto de mira

Desde Vox consideran que hay concejalías delegadas prescindibles, como la de Igualdad. Para sorpresa de nadie, la formación ultra cree que estas competencias son del Gobierno de Aragón, por lo que el ayuntamiento no tendría que prestar servicio alguno relacionado con las mujeres víctimas de la violencia machista. «Ni pido ni digo que se suprima este servicio, pero deben prestarse por una única administración», como es la DGA a través de Instituto Aragonés de la Mujer (IAM). 

«Lo único positivo» de la estructura para Calvo ha sido la fusión de Urbanismo e Infraestructuras, que recae en manos de Víctor Serrano, que también asumirá la portavocía del Gobierno del PP. Tampoco le ve mucho sentido a la división planteada por Chueca respecto a la concejalía de Seguridad Vial, que dependerá de Presidencia y no de la consejería y la delegación de Movilidad. «A ver cómo se coordinan», ha dicho con retintín. 

Las nuevas direcciones generales

Tampoco está conforme con las nuevas direcciones generales, como la de Proyectos Estratégicos y Proyección Exterior que ha creado Natalia Chueca porque, según Calvo, «se solapa» con Ebrópolis o la vigente Oficina de Proyección Exterior, que «ha sido otro de los fracasos de la Corporación anterior con un gasto de entre 200.000 y 300.000 euros para un volumen de información que no se ha leído nadie». A su juicio, puestos a crear direcciones generales, habría creado una de Captación de Inversiones. 

El portavoz de Vox, que ha vuelto a pedir que se fusionen los patronatos y sociedades, ha advertido a la nueva alcaldesa de que van a exigir que se cumplan las enmiendas de su formación incluidas en el presupuesto de 2023 y ha añadido nuevas peticiones, como la reordenación las línea de autobús, el diseño de un plan especial para el Casco Histórico o la depuración de aguas residuales, con una depuradora que ha llegado al fin de su vida útil, como es la de La Cartuja.

Ciudad del Deporte

Las nuevas exigencias que ha anunciado Vox se han mezclado con un aviso: o la DGA asume el coste «mayoritario» de la futura Ciudad Inteligente del Deporte que Chueca quiere impulsar, o no la apoyaran. Precisamente, la alcaldesa ha indicado este martes que va a ser uno de los primeros temas a tratar con el futuro presidente de Aragón, Jorge Azcón, salvo sorpresa, en la Comisión Bilateral de septiembre.

«Tenemos el proyecto muy avanzado», ha asegurado Chueca, que ha admitido que antes de mover ficha tienen que tener las garantías de que el Ejecutivo le cede al ayuntamiento los suelos del parking norte, donde se construiría. «Entendemos que sí, pero hay que formalizar esa cesión. A partir de ahí trabajaremos en las fuentes de financiación». 

Es aquí donde radica el problema para Vox. «Chueca dice que con 40 o 50 millones se hará, pero creemos que el coste llegará a los 100 y el ayuntamiento no tiene capacidad para financiarlo. Es un proyecto para Aragón», ha zanjado Calvo.