Salud

Un análisis de sangre permite predecir futuras recaídas en pacientes de cáncer de mama

Investigadores malagueños de Ibima han desarrollado este nuevo método no invasivo capaz de detectar la respuesta a los tratamientos y realizar un diagnóstico precoz en caso de que no haya remitido

Análisis de una muestra de sangre en un laboratorio

Análisis de una muestra de sangre en un laboratorio / Redacción

Arancha Tejero

La lucha contra el cáncer de mama sigue avanzando. Esta vez, gracias a la labor de un grupo de investigadores del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga y Plataforma en Nanomedicina (IBIMA Plataforma BIONAND) que ha dado un paso más en la detección temprana de este tipo de cáncer, que es el tumor más frecuente en las mujeres y que se estima que padecerán una de cada ocho. 

Se trata de una nueva metodología que, con tan solo una muestra de sangre, permite identificar cuál ha sido la respuesta a los tratamientos y realizar un diagnóstico precoz de la posible recaída en la enfermedad. Por lo tanto, esta novedosa técnica se presenta ante los oncólogos como una herramienta más eficaz para la intervención temprana, antes de que se produzca una recaída clínica evidente.

“El presente y futuro de la oncología están en la detección del cáncer incluso cuando está mínimamente presente, con el fin de aplicar una medicina personalizada y de precisión que permita abordar su curación de una manera más efectiva”, afirma Iñaki Comino, líder del Laboratorio de Biopsia Líquida Experimental del grupo ‘CIMO 1-Investigación Clínica y traslacional en Cáncer’ de IBIMA e investigador principal de este estudio liderado por el doctor Emilio Alba, director del Centro de Investigación Malagueño de Oncología (CIMO), director de la Unidad Clínica Intercentros de Oncología de los hospitales universitarios Regional de Málaga y Virgen de la Victoria y director del Centro de Investigaciones Médico Sanitarias (CIMES) de la Universidad de Málaga.

Monitorización ultrasensible

El estudio en cuestión ha sido publicado en la revista científica ‘npj Breast Cancer’ y su potencial se basa en incrementar el volumen de las muestras de sangre extraídas para poder lograr una identificación más precisa tanto del ADN circulante tumoral (ctDNA) como de las células tumorales circulantes (CTCs) en pacientes con cáncer de mama localizado. El objetivo de la investigación, según ha explicado el propio Iñaki Comino, se ha centrado en mejorar la sensibilidad y precisión de las pruebas de ctDNA y CTCs.

“La monitorización ultrasensible de la respuesta a los tratamientos e identificación temprana de las recaídas en el cáncer pueden ser cruciales para aumentar las tasas de supervivencia y mejorar la calidad de vida de los pacientes”, ha asegurado el doctor Comino, que insiste en que “con esta nueva metodología, hemos podido identificar la persistencia del cáncer de mama aun después de los tratamientos establecidos para erradicar la enfermedad”. En este sentido, destaca que esta detección permitirá realizar un manejo clínico de las pacientes “más oportuno y personalizado". 

Extrapolable a otros tumores

Según explican desde IBIMA en un comunicado, la implementación de esta metodología ultrasensible en la práctica clínica podría mejorar la perspectiva clínica de las pacientes con cáncer de mama localizado que no han respondido a los tratamientos primarios y pueden enfrentar una futura recaída, ya que al detectarlo precozmente podrán realizar una intervención temprana. 

Asimismo, una de las ventajas de este descubrimiento es que emplea un procedimiento mínimamente invasivo como es la extracción de una muestra de sangre. Por otro lado, según apuntan los investigadores, se trata de una metodología con potencial para ser adaptada a otros tipos de cáncer, lo que amplía su impacto en la oncología moderna.

Ensayos con pacientes

Para llevar a cabo el estudio se ha contado con la participación de pacientes con cáncer de mama temprano, a quienes se les extrajeron muestras de sangre periódicamente durante sus tratamientos. Estas muestras fueron analizadas utilizando tecnologías avanzadas que permiten la detección de niveles extremadamente bajos de ctDNA y CTCs. De esta manera, la presencia de estos componentes, y su evolución a lo largo del tiempo durante el tratamiento, permitió distinguir aquellas pacientes que respondieron al mismo, así como a aquellas que finalmente recayeron en la enfermedad después de la cirugía. 

“Este avance no solo es un logro para nuestro equipo, sino también un ejemplo de cómo la colaboración interdisciplinaria y el uso de tecnología puntera pueden llevar a descubrimientos que cambian vidas”, ha querido subrayar el doctor Comino, que también ha asegurado sentirse “muy satisfecho de aportar un granito de arena en la transformación del manejo clínico del cáncer de mama”.

Por otro lado, para la realización de esta investigación, el doctor Comino ha contado con una Ayuda Postdoctoral con el apoyo del Premio Carmen Lavigne a través de la Asociación Española Contra el Cáncer. Además, esta publicación científica se enmarca dentro del proyecto ‘Prevención y detección temprana de recaída en pacientes con cáncer de mama usando muestras de sangre’ llevado a cabo en el Instituto gracias al apoyo de la Fundación Unicaja, junto a otros dos proyectos también sobre investigación en Oncología, todos ellos coordinados por el propio Emilio Alba.