La actualidad del Real Zaragoza

Zapater, el capitán luce galones

El Zaragoza solo ha ido perdiendo 39 minutos de los más de mil que Zapater ha jugado como titular. Solo Cristian, Giuliano, Francho y Jair han formado más veces en el once con Escribá que el ejeano, que ha dejado en el banquillo a los últimos cuatro mediocentros fichados

Zapater, durante un partido jugado en La Romareda esta temporada.

Zapater, durante un partido jugado en La Romareda esta temporada. / Jaime Galindo.

Jorge Oto

Jorge Oto

El Real Zaragoza de Escribá es algo así como Zapater y diez más. El técnico valenciano considera indiscutible al capitán, cuyo nombre ha escrito en el once inicial casi siempre que ha estado disponible. De hecho, doce de las trece titularidades del ejeano se han producido desde que Escribá tomó las riendas (con Carcedo solo lo fue una vez, ante el Alavés, en el último partido del riojano en el banquillo). Solo otros tres jugadores de campo: Giuliano (16), Francho (15) y Jair (15) han aparecido más veces en la foto que Zapater, que, previsiblemente, volverá al equipo ante el Levante tras haber cumplido el partido de sanción tras su expulsión en Huesca.

Los números muestran a un Zaragoza mejor con su capitán sobre el campo o, al menos, más difícil de superar. Más de mil minutos (1.010) ha jugado como titular el ejeano, de los que en solo 39 el equipo aragonés ha ido perdiendo. Tres de ellos fueron en Mendizorroza, en su primera aparición en el once y la última puesta en escena de Carcedo, que retiró del campo al mediocentro tres minutos después de que el Alavés, con un jugador menos, se adelantara en el marcador. Los otros 36 también fueron contra el Alavés, en el duelo de la segunda vuelta disputado en La Romareda (1-4). El equipo vasco tomó ventaja en el minuto 20 y, ya con 0-2, Escribá sustituyó a Zapater en el 56.

La relevancia del aragonés es evidente. Ausente en dos de las tres derrotas sufridas por el Zaragoza en los diez últimos partidos (no jugó en Gijón, donde el equipo aragonés perdió por la mínima ni en la goleada encajada en Málaga), el capitán se ha hecho fuerte en la medular, casi siempre con otro canterano, Francho Serrano, a su lado. El dúo preferido por Escribá para ejercer en la sala de máquinas volverá, en principio, en el Ciutat de Valencia. Con ellos formando pareja en el eje, el Zaragoza ha ganado dos partidos, ha perdido otros tantos y ha empatado cuatro.

Puede con todos

La elección del técnico valenciano expone los galones del capitán, que acaba contrato el 30 de junio, y deja en evidencia la planificación de una plantilla en la que ninguno de los últimos cuatro mediocentros fichados en los últimos dos años son ahora titulares.

Especialmente relevante es el caso de Manu Molina, incorporado el pasado verano como jugador de confianza de Carcedo, y que no ha jugado un solo minuto en los cinco últimos partidos. O Alarcón, fichado el pasado mes de enero para ser fijo en el centro, y cuyo rendimiento está muy por debajo del esperado. Ambos son suplentes habituales, al igual que Grau, cuyo peso específico en el equipo ha bajado enteros desde la llegada de Escribá, que solo le ha concedido la titularidad en dos de los 18 partidos que ha dirigido.

Petrovic, al que el club rescindió en invierno, nunca contó para el valenciano, que siempre puso por delante a un Zapater incombustible.