DEL 30 DE JUNIO AL 2 DE JULIO

La danza flamenca de Antonio Najarro hará vibrar al Teatro Principal

La nueva obra del bailarín madrileño, 'Querencia', pretende retornar a los orígenes de la danza española para ensalzar el valor de estilos como los boleros, el flamenco o la danza estilizada

El bailarín Antonio Najarro, este lunes, durante la presentación de su espectáculo 'Querencia' en el Teatro Principal de Zaragoza.

El bailarín Antonio Najarro, este lunes, durante la presentación de su espectáculo 'Querencia' en el Teatro Principal de Zaragoza. / Ayuntamiento de Zaragoza

Álvaro Jordán

Álvaro Jordán

Tras el gran éxito cosechado con su último espectáculo 'Alento', el bailarín Antonio Najarro aterriza en el Teatro Principal de Zaragoza con motivo de la gira de su sexta producción: 'Querencia'. A través de esta representación de 75 minutos de duración, que estará disponible del viernes 30 de junio al domingo 2 de julio (con sesiones a las 20.00 horas excepto la del domingo, que será a las 19.00) el madrileño pretende mostrar un nuevo lenguaje y estética dancística en relación con la Escuela Bolera, la Danza Estilizada, la Danza Tradicional y el Flamenco, las cuales lleva años tratando de orientar hacia formas más contemporáneas. Sin embargo, el contrapunto de la obra es el deseo por parte del artista de revisitar sus orígenes al mismo tiempo a través de este encuentro entre épocas, de recuperar y ensalzar el valor de la danza española y la inspiración del lenguaje de los grandes ballets coreográficos que en su día hicieron grandes a figuras como Antonio Ruiz Soler o Mariemma, entre otros.

El espectáculo será uno de los máximos exponentes del estilo artístico de Najarro; quien como ha destacado el gerente de las Artes Escénicas, José María Turmo, «trata de investigar y evolucionar nuevas ramas artísticas sin dejar atrás la esencia químicamente pura del baile y la danza española de sus comienzos». A través de un gran formato, compuesto por 11 cuadros y 14 bailarines en escena (en igualdad de hombres y mujeres), el antiguo director del Ballet Nacional de España pretende poner en valor «las raíces del flamenco frente a la percepción del espectador, pero presentándolas de una forma más coreográfica», un aspecto que contrasta con el mensaje que quiso representar en su obra anterior, 'Alento', que buscaba enfocarse en una mirada hacia el futuro e innovadora a través de reminiscencias del tango y el jazz.

Flamenco coreográfico

'Coreográfica' es la palabra sobre la que más ha querido incidir el director, un aspecto que ha considerado «cada vez más olvidado en la danza tradicional. La intención de mi compañía, la cual considero compuesta por bailarines muy versátiles, es que esa danza coreográfica pueda palparse de la mano del espectador a través de un lenguaje abierto que pueda dar cabida a cualquier aspecto artístico, con estilos inspirados incluso en el ballet clásico». «He tenido en cuenta el respeto a las bases musicales que aprendí de la mano de figuras como Rafael Aguilar, Antonio Gades o Alberto Lorca; pero tampoco tengo miedo a probar cosas nuevas», ha continuado. Una de las claves de ese lenguaje abierto son las castañuelas, elemento de uso predominante en la obra que pretende efectuar ese fenómeno de vanguardia después de estar consideradas como un instrumento bastante «abandonado» a juicio del coreógrafo de Madrid.

«Al final, lo que sobre todo busco con este espectáculo, después de seis horas diarias de ensayos y de cuidados al milímetro, es tratar de emocionar al público mientras se mantiene la danza en la vista de todos, para que la gente pueda apreciarla sin necesidad de un conocimiento previo», ha declarado el bailarín.

Falta de compositores

Como soporte musical de esta producción, Najarro ha encargado componer una música original para orquesta sinfónica. Este es otro de los grandes retos de 'Querencia', dotar al repertorio de la música española de una nueva composición que llene el vacío que existe en las actuales composiciones sinfónicas para creadores de danza española. «A pesar de que hay un grandísimo nivel compositivo en nuestro género, se nota una falta de relevo generacional en los compositores. Necesitamos nuevos compositores, más jóvenes y ambiciosos, con nuevos proyectos e ideas», ha confesado Najarro.

La música ha sido compuesta por el pianista Moisés Sánchez y grabada por la Orquesta de Extremadura. Una sinfonía en la que tienen protagonismo los tiempos boleros, ritmos flamencos y melodías que hacen referencia a creaciones de repertorio de grandes compositores de los dos últimos siglos: como Falla, Turina, Granados o Albéniz.

Vestuario e iluminación

El vestuario es otro de los puntos fuertes de la obra. Su diseño ha sido encargado a Yaiza Pinillos, diseñadora especializada en el vestuario de Danza Española, con una gran proyección actual. Las indumentarias están inspiradas en un diseño tradicional, pero actualizado al mismo tiempo. Con una utilización de tejidos y tratamientos nuevos, volúmentes y cortes que conjugan la tradición con el vanguardismo.

El diseño de la iluminación corresponde a Pau Fullana, quien ha conseguido crear sorprendes creaciones escenográficas a través de la luz, jugando según Najarro un «papel corpóreo que ensalza el movimiento coreográfico de los bailarines y ensalza su vestuario».

Las entradas del espectáculo ya se encuentran disponibles a través del portal web del Teatro Principal, a un precio que oscila entre los 5 y los 25 euros.