Pitarch, juzgado en Zaragoza por un delito leve de maltrato psicológico y vejaciones

El exdirector general del Real Zaragoza, Jesús García Pitarch, ha sido juzgado este martes en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Zaragoza como presunto autor de un delito leve de maltrato psicológico y vejaciones a raíz de la denuncia interpuesta el 20 de octubre de 2022 por su expareja. Ambos se conocieron en la temporada en la que el valenciano fue el ejecutivo de mayor rango del club aragonés, en la última etapa de Agapito Iglesias, en el curso 13-14, si bien iniciaron la relación con posterioridad y durante unos años.

La relación acabó en noviembre de 2021, aunque tuvo solo carácter esporádico, puesto que el ejecutivo después de su salida del Real Zaragoza trabajó en el Baniyas FC de Abu Dabi, regresó al Valencia y también estuvo en el Aston Vila inglés. Pitarch ha declarado mediante videoconferencia, igual que lo ha hecho la víctima, que ha asegurado que el acoso y las vejaciones se mantuvieron una vez acabada la relación entre ambos.

Pitarch ha reconocido haber sido el autor de los mensajes que están en el sumario de la denuncia, pero ha asegurado que durante los años en los que ambos mantuvieron esa relación nunca insultó a la presunta víctima. Además, ha pedido disculpas públicas por la manera de referirse a la actual pareja de la víctima, un empresario bodeguero de la DO Ribera del Duero.

Desde la defensa del exdirectivo zaragocista se hace constar que hay un requerimiento notarial del 14 de octubre de 2022 donde se le pide por parte de Pitarch a su expareja la devolución de 72.000 euros que este le había prestado mediante varias transferencias, que están acreditadas y que ya se encuentran en la denuncia que se ha puesto en el Juzgado de Primera Instancia número 21 de Zaragoza para un juicio que tendrá lugar el próximo año.  La denuncia por maltrato psicológico y vejaciones llegó una semana después de ese requerimiento notarial. Además, la jueza también ha hecho constar las coacciones e intimidaciones de la presunta víctima a uno de los testigos.

Ahora, una vez que han declarado, el juicio queda visto para sentencia, teniendo en cuenta que la Fiscalía, al tratarse de un delito leve, ha pedido que se condene a Jesús García-Pitarch a 30 días de localización permanente. Mientras que la acusación particular solicita que se le imponga una multa de 900 euros así como una orden de alejamiento que le impida comunicarse o acercarse a su expareja durante un tiempo. Hace unos días, el abogado de la víctima propuso la retirada de la denuncia a la otra parte, pero Pitarch decidió seguir con el juicio, que tendrá otro capítulo dentro de unos meses por esa no devolución de los mencionados 72.000 euros.