LA ANTESALA FESTIVA DE LA NAVIDAD

El turismo aragonés es optimista para el puente pero ve lejos el lleno

El sector espera un nivel de ocupación alrededor del 75% y aguarda la llegada de la nieve como acicate

Los precios han subido en torno a un 15%, un aumento que los empresarios achacan a la inflación

Numerosas personas, este domingo, en la plaza del Torico de Teruel.

Numerosas personas, este domingo, en la plaza del Torico de Teruel. / EL PERIÓDICO

Arturo Pola

Arturo Pola

Apenas quedan dos días para que llegue el puente por antonomasia en el calendario laboral español. Los festivos de la Inmaculada y la Constitución siempre, y año tras año, son un aliciente para viajar y bien lo saben las entidades turísticas de Aragón, que con estas festividades dan el pistoletazo de salida a una de sus mejores épocas del año y que tiene como punto álgido las Navidades.

Sobreponiéndose a la incertidumbre inicial, aunque todavía no está completamente disipada, conforme han ido pasando los días el sector turístico ha ido paulatinamente mejorando sus previsiones de ocupación. Si bien no parece que el lleno vaya a alcanzarse en los hospedajes de la comunidad, sí que los empresarios son bastante optimistas con los cálculos que manejan de viajeros que van a elegir algún paraje aragonés para disfrutar del macropuente.

Pendientes de los turistas que esperarán a última hora a decidir si viajan (y también el destino), se espera que los datos de ocupación se acerquen al 75% en Aragón. Las cifras hasta final de la semana pasada ya dejaban el dato de un 58% de camas ocupadas y hasta el miércoles, dependiendo en buena parte del clima, esa ocupación ascenderá con seguridad.

Por ello, el sector se encuentra pendiente del cielo y esperan con ansias la llegada del oro blanco. «La gente está con muchas ganas de nieve», afirma Fernando Sánchez.

El alcalde de Canfranc está convencido de que la localidad altoaragonesa va a presentar «un gran aspecto» en unos días que siempre son «muy prolíficos» para la zona, aunque confiesa que la apertura de las estaciones de esquí siempre «da un plus» que es complicado conseguir de otro modo.

No obstante, a pesar de esa incógnita, los valles pirenaicos tienen ya un nivel de ocupación del 60% y en los alojamientos a pie de pista de las estaciones se dispara esa cifra hasta el 80%.

A parte del Pirineo aragonés, en el Matarraña, en el Sobrarbe y en algunos puntos de las Cinco Villas también se espera una gran afluencia de viajeros. «Estamos muy contentos. Este mundo es imprevisible, dependemos de los últimos movimientos y de posibles cancelaciones, pero la perspectiva es muy buena», asegura Felipe Díaz, el presidente de la asociación de empresarios turísticos de Sos del Rey Católico. «Este puente va a ser mejor que el del último año», vaticina. Uno de los motivos para ser más optimista que otros años es la colocación de los festivos durante la semana. Siendo los no laborables el miércoles y el viernes, un gran porcentaje de la población española dispondrá de 5 días seguidos para organizar su viaje.

Por la peculiaridad del calendario, la inmensa mayoría de turistas que disfrutarán estos días de Aragón son residentes en España. «Tenemos reservas de madrileños, catalanes, valencianos, vascos o navarros», enumera Díaz.

Algo más cautos se muestran en la provincia de Teruel, aunque desde la Asociación Provincial de Empresarios Turísticos mantienen sus esperanzas en que este mes de diciembre pueda compensar lo que en tierras turolenses ha sido un otoño «flojo». En Zaragoza capital, a pesar del aumento de la oferta cultural y gastronómica para estos días, las reservas se sitúan en torno al 50%.

Los precios

Para poder disfrutar del puente, y según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), los turistas van a tener que rascarse los bolsillos entre un 10% y un 20% más, un aumento con respecto al año pasado que los empresarios y los propietarios de alojamientos justifican en los niveles de inflación y en el aumento del coste de las materias primas. «Solo con lo que cuesta la luz y el gasoil ya nos vemos obligados a tomar esas medidas. No nos gusta, pero no tenemos otro remedio. Es necesario», asegura Díaz desde Sos del Rey Católico.

Un incremento que, sin embargo, no parece ahuyentar a los turistas que, junto a quienes poseen una segunda residencia y aprovecharán estos días para desconectar, trataran de disfrutar de las bondades y los paisajes de Aragón. En mayor o menor medida, las calles de la comunidad se van a llenar en uno días festivos que volverán a servir de antesala a la Navidad.