Ernst&Young, condenada a indemnizar con 3,2 millones a un centenar de inversores de Gowex

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a la auditora Ernst&Young a indemnizar con 3,2 millones de euros a un grupo de 130 inversores de Gowex, la tecnológica española cuyas cuentas manipuladas destapó Gotham City Research en 2014.

Ernst&Young, una de las big four, fue designada como asesora registrada de Gowex cuando esta debutó en el Mercado Alternativo Bursátil, la 'bolsa para pymes' en la que cotizan startups y pequeñas tecnológicas españolas. Gowex resultó ser una enorme bola de humo: el fundador, Jenaro García, falseó las cuentas durante años para inflar el valor de la acción. Cuando le pillaron, la acción cayó y dejó a miles de inversores tirados. García reconoció pocos días después que Gotham decía la verdad. Cabe recordar que Gotham City Research es la misma firma que recientemente ha cuestionado las cuentas de Grifols.

En su sentencia, la Audiencia Provincial considera que Ernst&Young incurrió "en una conducta negligente omisiva al no haber impedido la publicación de una información gravemente errónea sobre la actividad y situación patrimonial y financiera de la sociedad". Ernst&Young, cuyo papel era diferente del del auditor de las cuentas, no actuó "con la diligencia que le resultaba exigible en el cumplimiento de las funciones que tenía asignadas por la normativa legal y reglamentaria".

Los inversores han estado representados por la asociación de usuarios financieros Asufin con el asesoramiento jurídico de Colectivo Ronda. Fuentes de Asufin explican que la sentencia aún está pendiente de apelación por parte de Ernst&Young: si recurre, el caso llegará al Tribunal Supremo.

"Somos optimistas", dicen estas fuentes. "El Supremo ya ha fallado en contra de Ernst&Young en su condición de asesor registrado", recuerdan. Y es que una sentencia del alto tribunal de abril de 2023 ya condenó a la big four a indemnizar a inversores engañados, en este caso con 119.000 euros.

Para Óscar Serrano, abogado de Colectivo Ronda que ha ejercido la dirección letrada del proceso, la sentencia "acude en defensa de la credibilidad del sistema bursátil español y de los intereses de este grupo de pequeños accionistas, cuya adquisición de las acciones se fundamentó en la errónea creencia de que invertían en una empresa solvente cuando, en realidad, lo hacían en un verdadero fraude. La tarea de velar por la integridad y exactitud de esa información correspondía a E&Y, quien durante 4 años incurrió en dejadez culpable de sus funciones y responsabilidades".

Jenaro García, por su parte, está aún pendiente de juicio.