HALLAZGO IMPORTANTE

El archivo de la DPZ arroja luz sobre el misterio del sello azul de dos reales

El zaragozano José Antonio Herráiz resuelve uno de los grandes enigmas de la filatelia mundial, del que solo se conocen tres ejemplares

José Antonio Herráiz y Mercedes Trébol muestran el sello azul

José Antonio Herráiz y Mercedes Trébol muestran el sello azul / Ángel de Castro

Álvaro Jordán

Álvaro Jordán

¿Bajo qué circunstancias un sello de dos reales que debía ser anaranjado se imprimió de color azul? Este es el misterio que decenas de expertos de la filatelia, el campo de estudio sobre la historia postal, han intentado resolver durante más de 150 años. El archivo de la Diputación de Zaragoza ha sido capaz de zanjar este asunto gracias al investigador zaragozano José Antonio Herráiz, ya que ha encontrado entre sus fondos documentos del Gobierno Civil de Zaragoza que explican la historia completa de esta rareza. Estos se han presentado hoy en una rueda de prensa en la propia diputación, en la que han intervenido Herráiz y la diputada delegada de Archivos y Bibliotecas, Mercedes Trébol. 

El sello de dos reales azul es una singularidad internacional, puesto que solo se conocen tres ejemplares certificados como verdaderos. De esos tres ejemplares, uno está en la British Library de Londres y los otros dos se encuentran en manos de colecciones privadas españolas. Según Herráiz, en caso de salir a la venta, el precio de estos sellos podría superar el millón de euros

El zaragozano encontró la solución del misterio investigando en el archivo de la Diputación de Zaragoza durante el pasado mes de julio. Según ha contado el académico, se trató de un “golpe de suerte” que le llevó a descubrir un dossier completo dentro de los fondos del Gobierno Político de Aragón y que explica lo sucedido con este sello. Los documentos señalan que el 24 de diciembre de 1850 la Fábrica Nacional del Sello envió al Gobierno Civil de Zaragoza un total de 25 pliegos de sellos de seis reales. Cada pliego constaba de 170 ejemplares, organizados en diez filas y diecisiete columnas. Consistían en un total de 4.250 sellos.

Estancos de toda la provincia

Esos sellos debían repartirse el día 31 entre los estancos de toda la provincia de Zaragoza. Sin embargo, un día antes se detectó que en cada uno de esos 25 pliegos de sellos de seis reales había un sello de dos reales, concretamente en la intersección de la fila 8 y la columna 14. Fue ese error el que dio origen a una auténtica rareza: sellos de dos reales de color azul en vez de su habitual color rojo anaranjado. 

Una copia de uno de los sellos azules de dos reales.

Una copia de uno de los sellos azules de dos reales. / ANGEL DE CASTRO

Según ha explicado Herráiz, el gobernador civil avisó inmediatamente al director de la Fábrica Nacional del Sello, que a su vez ordenó la devolución a Madrid de los 25 pliegos equivocados para poder cuadrar las cuentas de reales de los sellos. Sin embargo, los pliegos ya estaban siendo troceados y repartidos entre los estancos. Todos los sellos erróneos se devolvieron excepto uno que no pudo ser encontrado. 

Dadas las características del error, atribuido a algún operario de la imprenta, el investigador ha admitido que es casi seguro que el hecho se repitió en el resto de provincias españolas: “Lo importante es que por fin tenemos constancia de la historia de este sello en Zaragoza, es un pequeño tesoro que tenemos el orgullo de poder contar aquí”. “No sabemos cuántos sellos de este tipo podrían haberse mandado a las demás provincias, y eso es lo que debemos seguir investigando. Evidentemente, no vamos a encontrarlos todos, pero los archivos provinciales podrían indicarnos el paradero de algún que otro ejemplar”, continuó. 

El nuevo archivo provincial

Por su parte, Trébol ha subrayado que el descubrimiento de la documentación sirve “para reivindicar y volver a poner de actualidad el enorme valor de los fondos documentales conservados en el archivo de la Diputación de Zaragoza”. Asimismo, ha recalcado que los planes de construcción de un nuevo archivo provincial se encontraban parados por el momento: “La propuesta fue aprobada en agosto de 2021 pero no ha habido ningún movimiento. La reforma nos permitiría ofertar un archivo a los pueblos para poder salvaguardar sus depósitos más importantes, sobre todo ante cualquier adversidad climatológica. Así que estamos a la espera de una respuesta del ayuntamiento”.