Negociación de investidura

ERC prioriza una Mesa soberanista en el Parlament y aleja un pacto con el PSC

Los republicanos alientan por primera vez un pacto con Junts, la CUP y los Comuns

Las dirigentes de ERC Marta Vilaret y Raquel Sans este lunes.

Las dirigentes de ERC Marta Vilaret y Raquel Sans este lunes. / ARC PUIG / ERC

Quim Bertomeu

ERC ha dado un paso más este lunes en las negociaciones sobre el arranque de la legislatura en Cataluña y ha dicho que su "prioridad" es formar en el Parlament una "Mesa antirrepresiva". Esto pasaría por negociar un pacto a cuatro bandas entre los republicanos, Junts, la CUP y los Comuns para tratar de controlar el órgano director de la Cámara catalana. A la vez, también significa que Esquerra aleja un pacto con el PSC.

Esta posición de ERC supone una evolución significativa respecto a lo que venían defendiendo los republicanos en los últimos días. Hasta ahora, el partido de Oriol Junqueras no se había decantado con tanta claridad por este pacto en la Mesa. Lo contemplaban, sí, pero hasta este lunes no habían expresado que era la prioridad. De hecho, se dejaban querer tanto por el PSC como por Junts.

La portavoz de ERC, Raquel Sans, ha explicado que esta Mesa "antirrepresiva" debería tener al menos dos objetivos: el primero, garantizar que puedan votar los diputados independentistas que viven en el extranjero para evitar la acción de la justicia. Son Carles Puigdemont, Lluís Puig (Junts) y Ruben Wagensberg (ERC). El segundo, garantizar que en el próximo Parlament se "pueda hablar de todo". Es decir, que desde la Mesa no se frenen debates y resoluciones que puedan entrar en conflicto con la doctrina del Tribunal Constitucional.

El plan de ERC tiene un asterisco: los Comuns ya han dicho que no están dispuestos a formar parte de esta suma, ya que no quieren ningún pacto con Junts. Esto significa que esta "Mesa antirrepresiva", si llega a buen puerto, acabará siendo una mesa independentista pactada entre ERC, Junts y la CUP. Si el PSC quiere contrarrestar este pacto y conseguir la presidencia del Parlament tendrá que movilizar al PP y a Vox a su favor.

Virtudes y defectos

Esta Mesa "antirepresiva" tiene virtudes y defectos para ERC. La principal virtud es la siguiente: si el PSC no articula un pacto a la contra, los republicanos tendrán con toda probabilidad la presidencia del Parlament. Y si el PSC sí articula un pacto a la contra, podrán denunciar que los socialistas empiezan la legislatura pactando con la derecha y la ultraderecha.

Pero no todo son buenas noticias para los republicanos. Si logran articular esta mesa independentista con Junts y la CUP, lo primero que les exigirán los posconvergentes es promover la investidura de Puigdemont como presidente de la Generalitat. Y si su situación no ha cambiado y sigue en el extranjero -por la dificultad de aplicar la amnistía-, se podría volver a iniciar el embrollo que ya vivió el Parlament tras las elecciones catalanas de 2017. Junts y ERC acabaron enfrentados y con graves acusaciones cruzadas.

La negociación para la mesa del Parlament se ha convertido en una partida de ajedrez que, con toda probabilidad, no se resolverá hasta el mismo lunes 10 de junio, el día en que tiene que constituirse la Cámara y elegirse a los miembros de la Mesa. Lo que sí está claro, sin embargo, es que en los últimos días se han enfriado las relaciones entre ERC y el PSC. El sábado, ERC fijó con vehemencia sus condiciones para cualquier pacto con los socialistas, y el domingo, Salvador Illa se revolvió contra los republicanos.

Aún es pronto para saber cómo acabará la negociación de la Mesa del Parlament, pero si esta negociación acaba en ruptura entre ERC y el PSC, pondrá más difícil que estos dos partidos lleguen luego a un acuerdo luego para investir a IllaLos republicanos ya hace días que aseguran que no les da "miedo" volver a elecciones.