La NASA ha lanzado, esta madrugada desde Cabo Cañaveral, la misión Monitorización de Emisiones Troposféricas de Contaminación (TEMPO). Se trata de un instrumento que ofrecerá una nueva visión desde el espacio de la calidad del aire en América del Norte. Lo hará con mayor detalle y frecuencia que los dispositivos anteriores. El instrumento es del tamaño de un lavavajillas y ha volado en el satélite Intelsat 40E a bordo del cohete Falcon 9. Monitorizará tres de los principales contaminantes: dióxido de nitrógeno, formaldehído y ozono.