Opinión | editorial

La estrategia tecnológica

Inteligencia artificial, cloud computing, realidad aumentada, metaverso, criptomonedas, NFT, robótica, tecnología blockchain, big data, nuevas redes sociales... Todos son términos que comienzan a ser cada vez más familiares para los ciudadanos en este comienzo del siglo XXI, aunque la evolución de las nuevas tecnologías los convertirán en el común denominador de una sociedad que navega irremediablemente hacia una nueva era. Aragón quiere no solo formar parte de ella, sino ser un protagonista de primer orden. Esa es la gran apuesta de legislatura del Ejecutivo autonómico que ayer cristalizó con el anuncio de la creación de un parque tecnológico para impulsar el tejido empresarial TIC en Zaragoza. Jorge Azcón avanzó que uno de los objetivos será generar, atraer y retener talento, y detalló que contará en una fase inicial de 40 hectáreas de superficie que incluirá espacios colaborativos y edificios para alojar empresas de distinto tamaño.

Este proyecto tendrá ahora que materializarse en una realidad paso a paso, cumplir fases, contar con el apoyo de la iniciativa pública y privada, así como con el concurso de las grandes empresas y del sector. Por lo pronto, esa comunión se pudo comprobar ayer en la jornada inaugural del congreso The Wave, una primera piedra de toque para lanzar a Aragón hacia el futuro y hacia una realidad que pivota en la tecnología.

Pocos eventos como The Wave (alrededor de 3.000 inscritos) han despertado tanta expectación en los últimos años. No era para menos, ya que en él se dieron cita los responsables de las mayores firmas tecnológicas (Microsoft, Google, Amazon Web Services e IBM, así como los principales actores del sector en Aragón, consultoras e instituciones. En resumen, todo el ecosistema que está llamado a convertir a Aragón en la tierra prometida de las nuevas tecnologías.

La tarea no es sencilla y exige del concurso de todos, pero hay ingredientes de sobra para que el objetivo sea una realidad en el medio y largo plazo. Aragón quiere sacar el máximo partido a sus mejores activos (energía, agua, ubicación estratégica, talento, capacidad de colaboración y agilidad administrativa) para convertirse en un referente nacional y del sur de Europa.

La celebración del The Wave, que no solo tiene vocación de permanencia sino que aspira a ser un epicentro tecnológico a nivel nacional e internacional, unido al anuncio realizado ayer por el presidente de Aragón, conforman los primeros pasos de una estrategia pensada para que la tecnología multiplique de forma exponencial las posibilidades de desarrollo, crecimiento, innovación y bienestar de la comunidad. Las inversiones milmillonarias de AWS y Microsoft para poner en marcha centros de datos en Aragón pueden ser solo la punta del iceberg. Ahora, lo decisivo es crear el ecosistema y creer que es posible.

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