First Dates es un éxito televisivo inigualable. Las cenas de solteros que buscan el amor en el restaurante más famoso de la televisión en España nunca defraudan. Para intentar encandilar a tu cita y llevarte un sí por respuesta en la decisión final frente a las cámaras hay que demostrar tus habilidades, sean cuales sean.
Esa fue la estrategia amorosa del zaragozano Alberto, que acudió a First Dates en busca de la fortuna del amor, que por fin le sonrió. Muchas personas le dicen que se parece a famosos de la talla como Freddie Mercury o incluso Clark Kent. Además, es un amante del deporte y ha dejado atrás su pasado en el gimnasio para pasarse a la calistenia y al pádel.
Fue el cuerpo deportivo de Alberto lo que más le llamó la atención a Carol. Una joven que había superado un tumor cerebral hace unos años y que había aprendido a valorar la vida. Fue esta triste enfermedad uno de los motivos por los que rompió con su anterior pareja lo que le animó a atreverse a acudir a First Dates en busca de un nuevo amor.
La cena fue por un camino inmejorable. Carol le contó a Alberto su pasión por la historia y el zaragozano le animó a visitar Belchite y conocer su pasado.
Pasado en Ahora Caigo
El deporte fue el siguiente tema a tratar en una conversación a la que también se añadieron Marisa y Cristina Zapata junto a Matías. El camarero invitó a Alberto a confesarle a su cita su gran secreto. Y es que el zaragozano tenía un pasado en la televisión. Hace unos años visitó el plató de Ahora Caigo cuando se puso a hacer flexiones mientras cantaba una melodía de Isabel Pantoja.
Fue en ese momento cuando Matías retó a Alberto a poner en práctica su habilidad compitiendo con una de las gemelas de First Dates. Al soltero se le olvidó la letra de la canción de la tonadillera por lo que empezó a bajar el ritmo mientras la hermana Zapata le superaba con diferencia.
Después de este show en directo, llegó el momento de que los dos comensales tomasen la decisión de si volvían o no a tener una segunda cita. Alberto lo tenía claro y se atrevió a declararse en tono irónico. "No tendría una segunda cita, tendría las que hicieran falta", admitió llevándose un sí por respuesta de Carol.
