Hizbulá lanza 200 cohetes y 20 drones a Israel y el Ejército israelí responde con ataques aéreos sobre el Líbano

La tensión en la frontera entre el Líbano e Israel no amaina. Tras el asesinato de un alto comandante regional de Hizbulá este miércoles por parte del Ejército israelí, la milicia libanesa ha respondido durante horas con el lanzamiento de al menos 200 cohetes y una veintena de drones hacia el norte del territorio hebreo. En las decenas de comunidades fronterizas evacuadas, las alarmas han sonado sin cesar. El Ejército israelí ha respondido con ataques aéreos sobre el Líbano, haciendo llegar sus aviones hasta la capital beirutí, donde han roto la barrera de sonido y desatado el pánico entre la población. Desde el pasado 8 de octubre, un día después de la masacre de Hamás y el inicio de la ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza, la frontera libanesa-israelí se ha convertido en otro frente de conflicto que amenaza con escalar a nivel regional.

En declaraciones oficiales, Hizbulá ha afirmado haber lanzado 200 cohetes y un enjambre de drones cargados de explosivos contra varias bases militares israelíes en el norte del país. Según declara la milicia libanesa, los ataques responden al asesinato de Mohammed Nasser en un ataque israelí ayer contra su automóbil cerca de la ciudad de Tiro, la mayor urbe del sur del Líbano. Se trata del segundo comandante regional de Hizbulá asesinado por Israel en aproximadamente un mes después de que el grupo iniciara sus ataques de represalia disparando más de 100 cohetes hacia el norte de Israel. La respuesta de este jueves es una de las mayores descargas de cohetes del grupo aliado con Irán desde el inicio de la guerra en Gaza, que, en territorio libanés, ya ha provocado casi 500 muertos.

Desplazamientos

Como ya es costumbre en los últimos meses, el funeral de Nasser ha servido al grupo para vociferar nuevas amenazas. Hashem Safieddine, jefe del consejo ejecutivo de Hizbulá, ha dicho este miércoles durante el evento en los suburbios del sur de Beirut que las futuras acciones de la milicia tendrán como objetivo "lugares inesperados" a modo de promesa para continuar con la respuesta al asesinato. Israel afirma haber interceptado gran parte de los proyectiles, aunque dos mujeres han resultado heridas mientras corrían en busca de refugio. Los enfrentamientos transfronterizos han provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas a ambos lados de la Línea Azul y la pérdida de los medios de vida de muchos de ellos, ya que gran parte de los cultivos han tenido que ser abandonados durante casi nueve meses y algunos han sucumbido a los incendios provocados por el impacto de la metralla en la tierra.

Durante las últimas semanas, a medida que Israel acaba de rodear el último rincón de territorio gazatí, han crecido los temores de que la guerra se traslade a la frontera libanesa-israelí. La sociedad y los medios hebreos tienen asumido que es inevitable. Los 7.000 ataques que se han lanzado ambos bandos desde octubre así lo confirman. Los equipos mediadores, con especial presencia de Estados Unidos, han intensificado sus esfuerzos para dialogar entre las partes y evitar un conflicto mayor que se extienda por toda la región. Muchos países europeos han vuelto a insistir a su ciudadanía que abandonen el Líbano lo antes posible ante el riesgo de una escalada mayor. Los analistas repiten que ninguno de los bandos quiere una guerra total, pero la realidad sobre el terreno parece otra.

Bombardeos en Gaza

El asedio israelí tampoco se detiene sobre la Franja de Gaza, donde ya han muerto más de 38.000 palestinos. En el norte del enclave, se han registrado múltiples víctimas después de que los aviones hebreos atacaran una escuela de Naciones Unidas que albergaba a personas desplazadas. Unos siete palestinos han muerto en un ataque israelí contra un edificio de cinco pisos cerca del Hospital Nasser en Jan Yunis, días después de que Israel ordenara a unas 250.000 personas que abandonaran las partes orientales de la ciudad devastada por la guerra en el sur de la Franja. En las últimas 24 horas, al menos 58 personas han muerto y otras 179 han resultado heridas a medida que los ataques se extienden por todo el territorio.

Tras semanas marcadas por la inacción en las conversaciones por un alto el fuego, el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, ha decidido mandar una delegación para formar parte del diálogo, según informan varios medios internacionales. Aún no está claro dónde tendrán lugar estos encuentros. Se dice que Netanyahu recalcó a sus negociadores "que la guerra terminará sólo después de lograr todos sus objetivos, y ni un momento antes". Estos objetivos incluyen la derrota total de Hamás, lo que podría decirse que contradice cualquier paso hacia un alto el fuego. Esta tarde el líder israelí convocará una reunión de su gabinete de seguridad para discutir las propuestas de Hamás sobre una tregua después de que la noche del miércoles anunciara que habían recibido la última propuesta de alto el fuego del grupo palestino.