Enrique Bunbury llenará este sábado el viejo estadio con casi 30.000 almas

El concierto comenzará a las 22.15 horas, aunque las puertas se abrirán sobre las 18.30. El 60% del público será de fuera de Zaragoza

Rubén López

Rubén López

La cuenta atrás ha llegado a su fin para los miles de fans de Enrique Bunbury. El aragonés no actúa en directo en su ciudad natal desde diciembre de 2017, así que la expectación es máxima. De hecho, la vieja Romareda rozará el 'sold out' con cerca de 30.000 almas. El concierto –el más grande que va a albergar el estadio desde el reencuentro de Héroes en octubre de 2007– comenzará a las 22.15 horas, aunque las puertas se abrirán entre las 18.30 y las 19.00.

Bunbury no ha atraído solo a seguidores de Zaragoza y un 60% del público será foráneo. Han llegado de Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia o Sevilla e incluso del extranjero (principalmente de Latinoamérica y Francia). Todo ello ha disparado la actividad hotelera de la ciudad con una ocupación del 93% para esta noche, según destacó este viernes la asociación Horeca.

En sus últimos cinco 'shows', Bunbury ha repetido el mismo repertorio, cimentado sobre todo en su nuevo disco, 'Greta Garbo', y en 'Expectativas' (2017). Así, en Madrid arrancó con 'Nuestros mundos no obedecen a tus mapas', 'Cuna de Caín', 'Despierta' y 'Hombre de acción', para posteriormente interpretar otros de sus grandes temas como 'El rescate', 'El extranjero', 'De todo el mundo', 'Lady blue' o 'Infinito'. Sin olvidar tres grandes clásicos de Héroes del Silencio como 'Entre dos tierras', 'Maldito duende' o esa joya versionada de Más Birras titulada 'Apuesta por el rock and roll'. 

Los Porches del Audiorama se convertirá este sábado en un punto de encuentro ineludible para los seguidores de Bunbury, ya que el centro comercial ubicado junto a La Romareda instalará una 'fan zone'. Así, entre las 16.00 y las 18.30 horas se realizará una emisión especial en directo del programa musical 'Días de borrasca', de Radio Esport Valencia, y desde las 18.30 hasta las 21.00 horas un DJ amenizará los momentos previos en un espacio que había sido demandado por los propios fans de Enrique Bunbury.