La DGA crea el Premio 'Nicanor Villalta' para "defender la tauromaquia"

El Gobierno de Aragón promoverá los valores culturales de la tauromaquia con la concesión del premio 'Nicanor Villalta' a la mejor faena de la temporada en las plazas de Zaragoza, Huesca y Teruel, con el objetivo de "defender la tauromaquia en un momento complicado", ha manifestado el presidente, Jorge Azcón.

Esta distinción reconocerá a quienes destaquen en el sector taurino, contribuyendo a promocionar y difundir esta manifestación cultural asentada en la comunidad.

El tallista Carlos Sota Gaspar y el escultor David Ballestar son los creadores del busto de Nicanor Villalta que se concederá como premio y que se ha podido ver, en un modelo de barro, en el acto celebrado en la Sala de Columnas del Edificio Pignatelli. La escultura será esculpida en madera de tilo americano blanco por Ballestar.

En cada temporada taurina se concederán tres premios, uno por provincia, para reconocer la mejor faena en las plazas de Zaragoza, Huesca y Teruel. Podrán ser premiadas aquellas personas que se dediquen profesionalmente al toreo y que hayan actuado en los ruedos aragoneses en la temporada taurina por la que se otorga el premio.

El galardón tiene carácter honorífico y conlleva la entrega de un busto representativo del torero Nicanor Villalta, que se otorgará en un acto público y solemne una vez finalizada la temporada.

El jurado estará compuesto por la consejera de Presidencia, Interior y Cultura, Tomasa Hernández, que ostentará la presidencia; el director general de Interior, Miguel Ángel Clavero; los miembros de la Asociación de Informadores Taurinos de Aragón Javier Valero --presidente--, y Ángel Abad --vicepresidente--.

También, la presidenta de la Peña Dominguera de Tarazona, Pilar Carcavilla, y la presidenta de la Peña Taurina femenina La Madroñera, Dorita Esparcia, en representación de las peñas taurinas; y la nieta de Nicanor Villalta, Almudena Villalta Perea, gran aficionada a la fiesta y crítica taurina durante muchos años.

Un torero glorioso

El jefe del Ejecutivo autonómico ha señalado que, con este premio, el Gobierno autonómico desea en primer lugar reconocer y resaltar la figura del torero aragonés "más ilustre".

Ha resaltado que Nicanor Villalta toreaba "con valor, pundonor, vehemencia, sinceridad, arrojo, clase y sentimiento" porque era un torero "con una personalidad especial en los ruedos"."Nos dejó como legado sus derechazos a pies juntos y de puntillas y sus precisas estocadas", que le llevaron a cortar 54 orejas en Madrid, un récord que nadie ha podido igualar todavía.

"Fue un torero glorioso, digno merecedor de dar nombre a este premio", ha manifestado. Asimismo, con el galardón se persigue defender a la tauromaquia en un momento en el que "está siendo atacada, tanto desde el Gobierno de España como desde la Diputación Provincial de Zaragoza".

Al respecto, Azcón ha apuntado que la institución provincial retiró en octubre del pasado año el patrocinio a los premios oficiales de la Feria del Pilar, con más de 40 años de historia; y en mayo de este año el ministro de Cultura anunció la supresión del Premio Nacional de Tauromaquia. "Ese mismo día anunciamos la creación de este premio Nicanor Villalta", una decisión que ha permitido al Ejecutivo entablar relación con la única descendiente viva del torero aragonés, Almudena Villalta, que será parte del jurado del premio que lleva el nombre de su abuelo.

Arte de las artes

La tauromaquia ha sido objeto de numerosos ataques a lo largo de su historia: fue prohibida en 1567 por el papa Pío V, en 1704 por Felipe V o en 2010 por el Parlament de Cataluña. Sin embargo, "ninguna de estas prohibiciones ha podido con la fiesta nacional, porque la tauromaquia forma parte de nuestro patrimonio cultural inmaterial", no solo para los españoles, también para los franceses o los latinoamericanos.

Azcón ha remarcado que la tauromaquia es "el arte de las artes" y ha inspirado a muchas otras expresiones artísticas, como la pintura, con Goya, Picasso o Botero como referentes; el cine, con cintas como ‘La Vaquilla’ de Luis García Berlanga, rodada en Sos del Rey Católico; la literatura, con exponentes como Chaves Nogales; o la poesía, con la obra de Federico García Lorca.

"Los toros son historia, son cultura y son tradición", ha continuado el presidente, indicando que también representan un apoyo al sector primario y al medio rural, "le pese a quien le pese". De hecho, Aragón es tierra de larga tradición y arraigo de la cultura taurina. Solo en 2023 se celebraron en la comunidad más de 2.814 festejos populares y 56 festejos mayores.

El interés que despiertan ha llevado a la televisión autonómica de Aragón, diez años después del apagón taurino, a recuperar la retransmisión de las corridas de toros, que comenzarán con una corrida de la Feria de la Albahaca de Huesca y otra de la Feria del Pilar de Zaragoza, que se sumarán a la tradicional transmisión de las vaquillas del Pilar.

Todo ello "son muestras del firme e inequívoco apoyo de este Gobierno de Aragón a la tauromaquia, porque la tauromaquia es arte y los toros son cultura", ha defendido tajante el presidente aragonés.

La consejera Tomasa Hernández ha dejado claro el compromiso de su Departamento para "defender las libertades individuales y que las tradiciones no se pierdan por las imposiciones", aseverando: "No vamos a dejar atrás nuestras costumbres". También ha señalado que "la tauromaquia constituye un ejemplo de nuestra tradición, de nuestra identidad, que ha ido evolucionando y adaptándose a la modernidad".

Javier Valero ha enfatizado: "Los taurinos vivimos momentos difíciles". Ha asegurado que la supresión del Premio Nacional de Tauromaquia "ha tenido el efecto contrario al que esperaba y la mayoría de las comunidades se han manifestado en contra". Ha observado que la economía de los toros recauda más IVA que la del cine.

Acerca de Nicanor Villalta

Nicanor Villalta Serrés, nacido en 1897 en Cretas (Teruel) y fallecido en 1980 en Madrid, fue un torero español y una figura destacada en el mundo de la tauromaquia durante la primera mitad del siglo XX. En 1907 emigró con su familia a México, país donde adquirió sus primeras nociones sobre el toreo y donde vistió su primer traje de luces, en junio de 1918 en Veracruz.

De regreso a España, en 1919 toreó una novillada en Zaragoza, pisando al año siguiente las plazas de Sevilla, Pamplona y San Sebastián, donde tomó la alternativa como matador de toros en agosto de 1922. Fue el primer torero al que se le concedió la Oreja de Oro en la Corrida de la Prensa de Madrid, en 1923, un reconocimiento que donó a la Basílica del Pilar y, allí, se fundió junto a otras joyas para hacer el ornato del camarín de la Virgen.

Era conocido por su valor, técnica con la derecha y gran capacidad para el toreo a pie, además de su habilidad con la espada. A lo largo de su carrera fue reconocido como uno de los toreros más valientes y técnicos de su época. Cortó 54 orejas en las dos plazas que toreó en Madrid --Carretera de Aragón y Las Ventas-- y salió 26 veces a hombros del ruedo. Su adiós definitivo fue en Zaragoza, en octubre de 1943, si bien su influencia perdura en la memoria de los aficionados y en el legado cultural del toreo.