La crónica del Valencia-Casademont Zaragoza: cara y cruz en La Fonteta (76-69)

Cara y cruz en La Fonteta para el Casademont Zaragoza, que firmó su mejor primera parte fuera de casa de la temporada y dilapidó su buen trabajo en un segundo tiempo pleno de desacierto y de alguna decisión incomprensible. Los 26 puntos anotados en el segundo tiempo condenaron al equipo de Fisac como consecuencia de su juego cada vez más espeso y contraído y permitieron a un Valencia con muchas bajas llevarse el partido con gran seguridad al final. Todo lo que había funcionado en la primera parte dejó de hacerlo en la segunda, en la que Fisac decidió prescindir de uno de los mejores hasta el descanso, Langarita, para darle diez minutos a Bell-Haynes, todavía no al 100%. El Casademont pudo haberse llevado el triunfo pero sus propios errores, en la pista y en el banquillo, lo impidieron.

Con bajas en ambos equipos (finalmente Emegano y Mencía fueron los descartados en el Casademont), Fisac apostó de inicio por dos cincos, Watt y Okafor, para hacer frente a Inglis y Davies. Con Cinciarini a los mandos, el equipo aragonés controló el tempo del partido desde el inicio y, aunque solo corrió lo imprescindible, tras algún robo, estuvo muy certero en ataque con un Okafor serio por dentro y, sobre todo, un Yusta tan confiado, tan seguro de sí mismo, que resultó infalible en el primer cuarto. Así, el Casademont pudo mandar en el marcado los primeros diez minutos excepto en un breve lapso en el que el Valencia puso el 17-16. El primer cuarto acabó 22-23.

Aunque Bell-Haynes estuvo en el banquillo, el primer relevo de Cinciarini fue Langarita. Y el zaragozano, como ya hiciera en el partido frente al Brindisi el pasado miércoles, revolucionó el partido. Con un descaro total, atreviéndose a ir contra todos, haciendo ante mayores lo mismo que ha hecho ante rivales de su edad toda la vida, hizo siete puntos que permitieron al equipo aragonés ir por delante pese a que el Valencia no le dejaba escaparse demasiado. Para variar, el Casademont estaba seguro en el rebote, superando en esa faceta al rival, y eso le permitió mantener las riendas del partido e, incluso, ampliar su ventaja para lograr la máxima antes del descanso (35-43) aunque los primeros veinte minutos acabaron 37-43 tras la primera parte más solvente del Casademont fuera de casa.

Tras el descanso Fisac mantuvo su apuesta por los dos cincos pero dio entrada a Bell-Haynes a los mandos y el canadiense no está a su mejor nivel por los problemas en el hombro que arrastra. A pesar de eso, el cuarto empezó bien para el Casademont porque logró su máxima ventaja (39-48) y el Valencia se cargó de faltas muy pronto. Pero el equipo aragonés fue perdiendo poco a poco su seguridad en la pista conforme iba fallando mientras el Valencia remontaba a lomos de un acertado Puerto que, con 8 puntos seguidos, contribuyó a darle la vuelta al marcador en el tramo final de este tercer parcial (62-58).

Al Casademont Zaragoza se le hacía bola cada ataque que tenía que afrontar. Smith apareció con sus primeros puntos, pero el escolta quería más y eso le llevó a fallar, a precipitarse en sus decisiones, para firmar un partido más que discreto, por no decir malo. Así que lo que fue creciendo fue la diferencia del Valencia, que llegó a los siete puntos (66-59) al inicio del último cuarto. 

El Casademont ya había perdido toda su ventaja y, a pesar de todo, Langarita vio la segunda parte sentado en el banquillo mientras al equipo se le escapaba el partido sin encontrar soluciones. El Valencia tampoco terminó de matarlo y el Casademont tuvo su gran oportunidad con una falta sobre Watt y una antideportiva de López-Aróstegui que le daba cuatro tiros libres y posesión cuando iba cinco puntos por debajo. Solo anotó un tiro libre (se dejó diez en todo el partido) y el Valencia se llevó el triunfo.