La legislatura de la pandemia y la bronca política llega a su final

El presidente de las Cortes de Aragón, Javier Sada, reconoció hace poco más de un mes en una entrevista con este diario que hasta él mismo se extrañaba de la paciencia que podía tener durante los debates en el Palacio de La Aljafería. Este martes, día en el que la X Legislatura baja la persiana, Sada respirará más tranquilo. Aunque se queda al frente de la Comisión Permanente, que ejercerá las funciones hasta que se formalice la nueva legislatura.

Un período convulso marcado, sobre todo, por tres factores fundamentales. El primero, la pandemia del coronavirus que puso en cuarentena a toda la sociedad, aunque en las Cortes supieron reponerse. Solo el primer pleno tras el estado de alarma, declarado el 13 de marzo de 2020, vio alterada su celebración, que tuvo que darse unos días más tarde de lo previsto. Con mascarillas, distancia social y mamparas protectoras, la política sorteó un escollo inimaginable que tiene en el 23 de abril, Día de Aragón, de ese 2020 una de las fotografías que marcarán para siempre la hemeroteca política de la comunidad.

Olvidados a medias todos los estragos de la pandemia, la guerra de Ucrania trastocó la salida de Europa de la crisis del Covid-19. Las Cortes de Aragón mostraron su solidaridad con el pueblo ucraniano desde el inicio del conflicto y más de un año después siguen junto a ellos, como demostraron en el recuerdo por el aniversario del recrudecimiento de la lucha entre Rusia y Ucrania.

Sada: "Hasta yo me he extrañado de la paciencia que puedo llegar a tener"

Y la tercera pata de este recuerdo a la X Legislatura la pone un ruido político que se instaló en La Aljafería hace cuatro años y parece que, por mucho que cambie el color del Gobierno, si es que lo hace, llegó para quedarse. La tensión creció con el paso del tiempo y los ataques no solo llegaron entre los miembros del cuatripartito que forman el Ejecutivo y aquellos que se quedaron en los sillones de la oposición.

Grandes proyectos, como el de la unión de estaciones del Pirineo, han servido para mostrar las diferencias de un Gobierno de coalición que, pese a las también existentes crisis internas de los partidos, ha sido capaz de llegar con vida hasta el final del curso político.

Este martes, el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, firmará el decreto que anunciará la convocatoria de elecciones del próximo 28 de mayo. Con su publicación en el BOA, las Cortes de Aragón quedarán oficialmente disueltas. Por delante, una precampaña, una campaña y unos comicios de los que saldrán los nuevos rostros de la política autonómica.