Un grupo de 22 jóvenes procedentes de distintos países de Europa llegaron a Zaragoza el pasado 3 de septiembre para participar durante quince días en el Voluntariado Internacional en Pueblos de Aragón. Gracias a la Asociación de Estudiantes Europeos, sin ánimo de lucro, estos jóvenes animaron las calles de Moros del 5 al 8 de septiembre.

El Voluntariado Internacional en Pueblos de Aragón, que este año cumple su décimoquinta edición, se financia a través de la Comisión Europea y de los ayuntamientos implicados, que facilitan el alojamiento y en algunos casos la manutención. En total, se destinan unos 14.000 euros al programa.

El taller se divide en dos partes, una teórica, sobre la historia del voluntariado, técnicas de animación, mesas redondas o charlas; y otro apartado práctico. Las materias más apasionantes para estos jóvenes llegados de Grecia, Turquía, Italia, Alemania, Bulgaria, la República Checa o Rumanía son la cocina internacional y la manualidades, porque les permite relacionarse con la gente de cada pueblo y conocer su cultura.

A cambio, ellos les transmiten sus costumbres mediante juegos tradicionales y otras actividades, como el mercado medieval, que entretiene sobre todo a los más pequeños de las localidades receptoras, según explicó el alcalde de Moros, Manuel Morte.

Auténtica fiesta

Los voluntarios convirtieron esta localidad de la Comarca Comunidad de Calatayud en una fiesta entre el lunes y el jueves de la segunda semana de septiembre.

En Moros se habilitó un local de la casa de Cultura como alojamiento y los más jóvenes del municipio compartieron con los visitantes prácticamente todo el día, según explicó Morte.

Para formar parte de este taller, los estudiantes previamente han tenido que remitir a las universidades de verano una carta de motivación, ya que "no son unas vacaciones pagadas", señala Adolfo Muñoz, uno de los organizadores.