--¿Débora Quelle es su nombre auténtico?

--Sí, sí.

--Con ese nombre ya tiene media carrera lograda.

--(risas). El apellido Quelle es alemán y mi padre es gallego. Hace siglos que ese apellido está asentado en Galicia...

--¿Por qué le gustan los dedos?

--Te voy a hablar de los dedos-caracol: son autorretratos conceptuales. El dedo es la herramienta básica del escultor, y además el modelo lo tengo siempre a la vista. No me tengo ni que poner espejo...

--Ja, ja.

--Son elementos de mi mundo. Cuando los vemos, ni el cuerpo es el cuerpo de un caracol, pero la forma visual vemos un caracol.

--Pues hablemos de los caracoles...

--Porque el mundo del artista es complicado y lento. Y llevas tu carrera y tus ilusiones a las espaldas. Como el caracol. Mis esculturas muestran un dedo hacia arriba, en señal de ánimo. Hay una escultura que se llama Up, precisamente.

--¿Y los abismos?

--Están en el grupo de obras haciendo la comparativa entre los abismos y el dedo-caracol. El abismo es el escenario donde se desarrolla la acción, espacios para la reflexión.

--¿Qué prefiere? ¿La escultura pequeña o la gran obra?

--Toda son importantes. Depende cómo la concibas. No tengo problema y me encanta hacer escultura monumental... A ver si salimos de la crisis y nos encargan grandes obras.

--¿Precisamente la crisis afecta más a la escultura?

--Yo creo que los escultores estamos en crisis permanente. Siempre lo hemos tenido peor que los pintores, quizás por la falta de espacio en las casas. La pared la compras ya con el piso, pero el espacio para una escultura lo tienes que añadir después.

--Me parece ver joyas también.

--Sí, combinadas con la piedra. La joya forma parte de la escultura, de manera que quedan disimuladas como joyas. Pero se pueden extraer y ponérselas encima.

--No pinta...

--Me gustaría pintar más... Me siento sobretodo escultora, aunque doy clases de dibujo.

--¿A qué aspira?

--La respuesta es muy sencilla: a poder dedicarme toda la vida a lo que me gusta: a la escultura. .

--No ve mucho la tele, ¿verdad?

--Hace días que no veo la tele. Se puede vivir sin televisión. También depende de los amigos que tengas, y no tengo nada contra ella, porque a menudo te distrae.

--¿Qué veremos en la galería Salduba?

--Veintinueve esculturas: abismos, dedos-caracol, grifos y torsos. En piedras y mármoles.