Municipal

Vox abandona el pleno en Huesca y amplía la fractura con el PP

Los dos concejales de la ultraderecha dejaron el cónclave tras el primer punto, denunciando que el nuevo reglamento está hecho "contra ellos", para limitar su número de mociones

El PSOE ha retirado las tres propuestas del pleno para "no entrar en el circo" y ha pedido a la alcaldesa, Lorena Orduna, que "apacigüe su relación con Vox"

Momento en el que los dos concejales de Vox abandonan el pleno en el Ayuntamiento de Huesca.

Momento en el que los dos concejales de Vox abandonan el pleno en el Ayuntamiento de Huesca. / VOX HUESCA

Sergio H. Valgañón

Sergio H. Valgañón

Las relaciones entre PP y Vox en el Ayuntamiento de Huesca han vuelto a tocar este martes un punto de alta tensión. Los dos concejales de la ultraderecha han abandonado el pleno tras el primer turno de palabra, criticando la "medida anti Vox" aprobada en el reglamento, que limita el número de plenos y mociones que cada grupo municipal puede presentar en cada pleno, en función siempre del número de concejales. Un nuevo episodio en la complicada relación que la alcaldesa, Lorena Orduna, mantiene con su socio preferente de la ultraderecha.

Apenas habían transcurrido diez minutos de la sesión plenaria cuando el turno de palabra llegó al portavoz de Vox, José Luis Rubió, que ha criticado que este era "el primer pleno con el nuevo reglamento orgánico anti Vox". Así, Rubió ha afeado "la inactividad y la inoperancia del equipo de Gobierno", sobre el que ha afirmado que tiene "una manifiesta falta de trabajo" y ha llegado a "censurar" el oficio de Vox, en su opinión. "Lo hacen para evitar para quedar en ridículo por su nulo trabajo", ha insistido el portavoz de Vox, que también ha señalado que las comisiones no se están convocando "en un órdago a la pasividad".

"Las fotografías no cuentan como trabajo, señora alcaldesa", ha lanzado Rubió en un dardo directo a Lorena Orduna, con quien la relación es complicada desde la aprobación de los presupuestos y se ha ido tensando con el paso del tiempo, con exigencias como la cancelación de Periferias o con la reprobación del vicepresidente Alejandro Nolasco, que rompió un panfleto del Ramadán publicado por el propio consistorio oscense.

Acto seguido, los dos concejales de Vox han abandonado el pleno, que ha tenido dos minutos de receso para abordar qué hacer con las mociones del PSOE. Los socialistas las han retirado, quedando fuera del pleno "los tres únicos temas de gestión que se iban a tratar en la sesión", tal y como ha detallado la portavoz socialista, Silvia Salazar.

La propia Salazar ha afirmado que la retirada de las mociones se enmarca también en que el PSOE "no participará en el circo que se ha visto hoy", mientras que ha criticado que "la ciudad sigue perdiendo oportunidades mientras Lorena Orduna no consigue apaciguar la relación con Vox". "Las tensiones entre el Partido Popular y Vox han impedido hoy, una vez más, que el Ayuntamiento de Huesca trabaje por sus vecinos", ha aseverado Salazar, que ha recordado que el PSOE ofreció sus votos en los presupuestos para no tenerque pactar con Vox: "Consecuencia de aquella negativa es que hoy nos encontremos con una alcaldesa incapaz de gestionar los asuntos del día a día con un gobierno en minoría".

Por su parte, el primer teniente de alcalde y portavoz del Ayuntamiento de Huesca, Ricardo Oliván, ha defendido que el nuevo reglamento "fue aprobado por 23 de los 25 concejales" y ha afirmado que un pleno es "el máximo exponente de nuestra representación, un foro de debate". "Se ha hurtado a los ciudadanos de conocer la opinión de los representantes sobre temas muy importantes", ha criticado Oliván, señalando en este punto también al PSOE por retirar sus mociones.